El Burgo es un terreno que se encuentra a las afueras de la villa, en el camino que actualmente conduce a las piscinas y el pinar. Consta de un palacio, que en su día fue residencia de verano de los obispos de Segovia, y una finca donde antaño se plantaron muchas clases de árboles frutales, considerándose una gran huerta.
Actualmente el palacio se cree que es de propiedad particular y se encuentra casi en ruinas, así como los muros que le guardaban. La finca dejó de ser huerta para ser explotada como tierra productora de cereal y girasol.
En estos terrenos se encontraba antaño una Ermita de donde aún se conserva su Virgen (del Burgo). Era famosa pues se sacaba en procesión convocada por muchos pueblos en épocas de enorme sequía para rogar que trajera lluvia a los campos.